(Carta escrita en Agosto de 2014, en India)
Tres meses a tu lado…
y no dejas de sorprenderme, cada día, cada momento sigue siendo tan especial como la primera vez que te conocí, hace ya tres años.
Y ahora que por motivos del visado estoy lejos de ti, te sigo llevando conmigo para no echarte tanto de menos.
En pocos días regreso de nuevo a Ladakh, al lugar que poco a poco se ha ido convirtiendo en mi segundo hogar.
Cada año que vuelvo a ti, me sigues dando tanto, que solo puedo decirte una vez más GRACIAS…
GRACIAS por enseñarme a «parar», gracias por recordarme constantemente el enorme tesoro que llevo dentro, gracias porque cada vez siento más profundamente «tu silencio», «mi silencio», el mejor regalo que me has podido dar.
GRACIAS porque continuas enseñándome que el sentir ese «silencio» no depende del lugar donde estés ni del tiempo.
GRACIAS porque me has hecho comprender que el silencio ha estado siempre conmigo, en mi interior mas profundo, incluso en los momentos mas caóticos y «ruidosos» de mi vida…
GRACIAS LADAKH, GRACIAS INDIA…
Pilar
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